La industria de la belleza está en constante evolución. En los años 80, la atención se centró en los ingredientes de alta eficacia, a menudo sin tener en cuenta la ética o el impacto medioambiental. Los años 90 trajeron consigo un auge del marketing creativo, con términos como "natural" y "libre de crueldad animal" que se utilizaban de forma más laxa. A principios de la década de 2000, se produjo el auge de los ingredientes "veganos", impulsados por la influencia de las redes sociales y organizaciones como PETA, que aumentaron la conciencia sobre lo que realmente significa ser libre de crueldad animal.
Hoy en día, las personas son más conscientes de lo que ingieren, no solo en su cuerpo, sino también en su piel. Este cambio plantea una pregunta importante: ¿qué significa que un producto sea vegano? Y si algo no es cruel, ¿no es también vegano?
Entender qué es vegano y qué no es cruel
Según The Vegan Society, el veganismo es “una forma de vida que busca excluir, en la medida de lo posible y practicable, todas las formas de explotación y crueldad hacia los animales para la alimentación, la vestimenta o cualquier otro propósito”. Por otro lado, Merriam-Webster define “libre de crueldad” como “desarrollado o producido sin pruebas inhumanas en animales”.
¿Cuál es la diferencia?
La diferencia entre vegano y libre de crueldad animal puede ser sutil pero significativa. Un producto libre de crueldad animal significa que el producto final no se prueba en animales. Sin embargo, esto no significa necesariamente que los ingredientes sean libres de crueldad animal. Para que un producto sea verdaderamente libre de crueldad animal desde su inicio hasta su producción, son esenciales certificaciones independientes como el logotipo de Leaping Bunny. Esta certificación garantiza que el producto es 100% libre de crueldad animal.
Sin embargo, un producto libre de crueldad animal puede contener subproductos animales como lanolina o miel, que no son veganos. Los productos veganos excluyen todos los ingredientes de origen animal, lo que los convierte en una opción más ética para quienes se comprometen a evitar la explotación animal.
¿Por qué debería importarle?
El uso de subproductos animales en productos de belleza puede tener impactos ecológicos y plantear riesgos debido a un control de calidad inconsistente. Los ingredientes de origen vegetal y mineral ofrecen una consistencia que los ingredientes de origen animal no pueden igualar. Los productos veganos, ricos en vitaminas, ácidos grasos y nutrientes eficaces, son especialmente beneficiosos para las personas con piel sensible.
En Alexandria Professional®, somos apasionados por los animales. Desde el principio, nos comprometimos a no participar nunca en prácticas que dañen a los animales y estamos orgullosos de tener la certificación Leaping Bunny y la certificación vegana de la Vegan Society.